Eso me pasó, por ejemplo, el día en que llegué la escuela, tuniquita blanca, peinadito p'al costado (porque hacía 3 meses que me olvidaba de ir a cortarme el pelo), afeitadito como huevo e' ciclista, mochilita con los dos tirantes puestos en los hombros, caminando como de costumbre mirando al piso (por si acaso encontraba dinero, chiclets, celulares o algo de valor tirado)...
De repente, levanté la cabeza, dos niños de 6to más altos que yo (sí, ya sé que no se necesita mucho) me miraron de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba y viceversa, fruncieron el ceño con cara de "Te voy a hacer bullying" y me dijeron "Sos nuevo, no?", a lo que rápidamente, como en los viejos tiempos, entré en pánico y, como un acto reflejo, les respondí algo me salvó de la inminente paliza: "Si me golpéas le digo a mi mamá".
Y bueno, quieren saber como llegué a estar de practicante en una escuela y ser casi atacado por dos alumnos de dicha institución? La verdad que no lo tengo muy claro. De niño soñaba con ser Ginecólogo o Fotógrafo de Playboy, así que no fue por vocación. Más bien me recomendaron que probara con esa carrera, y justo la coyuntura del momento hizo que me pareciera una buena idea.
-Me la pasaba jugando al preguntados (así que estudiar Magisterio seguramente iría a mejorar mis habilidades en dicho juego).
-Estaba soltero (por lo cual una carrera como Magisterio o Enfermería donde el 99% son alumnas era el paraíso mismo).
-Era una oportunidad laboral para llegar a dirigir a La Celeste (como es el caso de O.W. Tábarez).
-Era gratis (de arriba un rayo).
-Trabajando de barman, todo el mundo me decía "Maestro" para pedirme algo (así que ya iba a estar acostumbrado para cuando me tocara dar clases).
-Me gusta enseñar y me gustan los niños (este es el momento en el que podés decir "aaaaaw").
-También me gustan los perros y los gatos (no tiene nada que ver con la elección de la carrera, pero es para que digas "aaaaaw" de nuevo).
-Es la carrera más divertida del universo (eso lo pude comprobar en la práctica de observación, en la que me pasé todos los recreos jugando a las escondidas con los gurises).
-Estaba soltero (ya les dije que Magisterio y Enfermería se llena de mujeres? Ah, ok, mala mía).
Y bueno, todo eso sumado a que nunca sé que carajo inventar con mi vida y cada ciertos años necesito un cambio radical, hicieron que terminara estudiando Magisterio.
Al principio me costó un poco volver al sistema educacional. Por ejemplo, cuando luego de una clase de Lengua, mi cabeza no paró de repetir inconcientemente y de manera random la palabra "Diptongo", algo que no recordaba que era, y me sonaba más al nombre del hermano del "Motumbo" que a otra cosa... Por varios días me sentí como Dexter en el capítulo de "Homelette du Formage" pero mucho más pior, porque cada tanto sigue resonando esa palabrita en mi subconciente... Diptongo...
O cuando me prometí a mi mismo que si en la tercera clase de Historia, cuando se hablara de "Historia de los annales" me seguía imaginando una portada de una película XXX con dicho título, iba a considerar seriamente cambiar de carrera y dedicarme a lo que siempre quise ser desde chiquito.
O cuando tuve que hacer la máscara de papel maché sobre la cual escribí un agónico tutorial en este mismo blog.
Pero bueno, pese a todo, acá estoy, feliz, ya terminando mi primer año, puteando porque después de las vacaciones ya tengo parciales de nuevo y estoy más pintado que la Gioconda.
Aprovecho entonces en el Día del Maestro, a contarle a mis lectores, como terminé estudiando Magisterio, seguramente no se lo esperaban de mi, pero así es la vida, cada cual puede hacer de su culo un pizarrón y usar cuanta tiza quiera... (Todavía tengo que refinar un poco esa metáfora, pero va por ahí).
Y bueno, ta, nada, básicamente eso, desearle un feliz día a todos los Maestros y Maestras del mundo, y porque no, del universo también, a las futuras Maestras compañeras, y a yo que algún día lo seré (como Jorge (Jorge Seré, ex arquero de Nacional, chiste interno malo)).
PD: Gracias al ser confundido con un alumno y casi golpeado, desde ese entonces aprendí que no me puedo afeitar más por los siglos de los Campeones de los Siglos, Amén.
0 comments:
Publicar un comentario