"TODOS LOS DÍAS TENEMOS LA OPORTUNIDAD DE SER TAN IDIOTAS COMO PUEDAMOS", expresada esta primer premisa básica, paso a contarles la pequeña cagadita (o "a pequenha cagadinha" en este caso) que me mandé el domingo.
Pues bien, resulta que se celebraban los 110 años de Punta del Este y yo estaba muy pancho haciéndome el barman en un stan de la feria montada en la vieja Ancap (que feo se lee poner las palabras "montada" y "vieja" tan juntitas, nocierto?)...
Tragos van, tragos vienen, comienzo a recibir cada vez más clientes turistas, sobre todo brasileros...
Entonces se me prende esa puta lamparita que debería de tener apagada de por vida y no tengo mejor idea que aprovechar el momento para practicar mi portughenchi, para hacer honor a mi segundo apellido que delata mi descendencia brazuca; pues bien, aunque usted no lo crea soy un Moraes y la caipirinha corre por mis venas... Yo no sé si alguna vez se los dije, pero en mi cabeza, yo hablo portugués como un ronaldinho más, sin embargo, la realidad se empeña en hacerme saber lo contrario cada vez que puede.
Ta bom, arranco a falhar con uno, dos, tres grupos de turistas brasileros y meu confianzhinha se faiz a mais grande du mundu cada vez que le meto una palabrinha en portughezinho...
Arranco a explicar que traghinhos toy fazendo y le arranco a mandar fruta, literalmente:
"Tein Caipirinha que voçe conoci muitu; tein Clericó, que è um vinho branco com fruitas, ron, azuquinha; o tein daiquiris du fruta, du ananá o pinha, durazno o FRANGO". Ese discurso lo repetí varias veces hasta que en una, una garotinha me dice "Tein di MORANGO"? Ahí rebobino en mi cabeza el discurso que había estado repitiendo casi que de memoria, le meto al replay y lo pongo el slow motion en la parte en que digo FRANGO en vez de MORANGO...
Ahora bien, para los que, al contrario di este garotinho, no tienen ni puta idea de portughechi "frango" significa pollo, por lo que este pichonzinho di filho da puta estuvo toda la tarde ofreciéndole a los turistas brasileros un DAIQUIRI DE POLLO.
Ta bien, ahora les parecerá gracioso y me harán bowling como a Sendic, pero el tiempo es el mejor amigo del hombre... Ah no, ese era el perro... Le erré de frase, va de nuevo... El tiempo me dará la razón y un día, la historia de la coctelería tendrá en sus páginas la historia de cómo nació el primer daiquiri comestible de pollo y este susodicho será leyenda.
Pues bien, resulta que se celebraban los 110 años de Punta del Este y yo estaba muy pancho haciéndome el barman en un stan de la feria montada en la vieja Ancap (que feo se lee poner las palabras "montada" y "vieja" tan juntitas, nocierto?)...
Tragos van, tragos vienen, comienzo a recibir cada vez más clientes turistas, sobre todo brasileros...
Entonces se me prende esa puta lamparita que debería de tener apagada de por vida y no tengo mejor idea que aprovechar el momento para practicar mi portughenchi, para hacer honor a mi segundo apellido que delata mi descendencia brazuca; pues bien, aunque usted no lo crea soy un Moraes y la caipirinha corre por mis venas... Yo no sé si alguna vez se los dije, pero en mi cabeza, yo hablo portugués como un ronaldinho más, sin embargo, la realidad se empeña en hacerme saber lo contrario cada vez que puede.
Ta bom, arranco a falhar con uno, dos, tres grupos de turistas brasileros y meu confianzhinha se faiz a mais grande du mundu cada vez que le meto una palabrinha en portughezinho...
Arranco a explicar que traghinhos toy fazendo y le arranco a mandar fruta, literalmente:
"Tein Caipirinha que voçe conoci muitu; tein Clericó, que è um vinho branco com fruitas, ron, azuquinha; o tein daiquiris du fruta, du ananá o pinha, durazno o FRANGO". Ese discurso lo repetí varias veces hasta que en una, una garotinha me dice "Tein di MORANGO"? Ahí rebobino en mi cabeza el discurso que había estado repitiendo casi que de memoria, le meto al replay y lo pongo el slow motion en la parte en que digo FRANGO en vez de MORANGO...
Ahora bien, para los que, al contrario di este garotinho, no tienen ni puta idea de portughechi "frango" significa pollo, por lo que este pichonzinho di filho da puta estuvo toda la tarde ofreciéndole a los turistas brasileros un DAIQUIRI DE POLLO.
Ta bien, ahora les parecerá gracioso y me harán bowling como a Sendic, pero el tiempo es el mejor amigo del hombre... Ah no, ese era el perro... Le erré de frase, va de nuevo... El tiempo me dará la razón y un día, la historia de la coctelería tendrá en sus páginas la historia de cómo nació el primer daiquiri comestible de pollo y este susodicho será leyenda.