QEPD querida Jarra Elécrica, fuiste un electrodoméstico bueno, familiar y solidario, te lo dije siempre en vida y espero que me estés escuchando desde arriba.
Te acordás cuando una vez te confesé que para mi eras el mejor invento eléctrico del hombre después de la picana? No exageraba. Siempre lo sentí así.
Recuerdo el primer día que te vi, roja como la pasión, con un logo negro que decía "Kassel", entre tantas jarras eléctricas carísimas y de marcas chetas, en una góndola del Devoto... 13 dólares me costaste (cuando el dólar ni siquiera estaba tan alto) pero lo que me diste en vida, no se puede medir en dinero...
Recuerdo haberte subestimado en nuestro primer encuentro, te compré pensando "Esta calentadora de agua (porque en ese entonces jamás había tenido una jarra eléctrica y pensaba que se llamaba "calentadora de agua") barata y poronga, que tiene nombre alemán y seguramente es made in China, si me dura 3 meses tiro cuetes". Pero en los hechos, me demostraste que estaba equivocado.
Recuerdo cuando al año y medio se te rompió la llave que cortaba la calentada de agua, sin embargo, seguiste como una campeona, calentando el agua de mis mejores mates.
Incluso cuando me olvidaba de desenchufarte, no cortabas y seguías calentando el agua, convirtiendo la cocina en un sauna, haciendo que mi vieja me cagara a puteadas por pelotudo.
Recuerdo también cuando te dejé toda una noche calentando, me olvidé por enésima vez de desenchufarte y quedaste seca como tanque de moto de uruguayo clase media baja a fin de mes (si estaré emocionado que hasta me salió una hermosa metáfora). En ese momento pensé que habías muerto por mi culpa, mas al colocarte agua nuevamente, resucitaste y volviste a calentarla con más fuerza que nunca.
Los minutos que ahorré gracias a vos, valen oro. La hija de puta e inútil de la caldera que se calienta a gas en la cocina me hacía perder horas de mi vida a lo bobo. Esas horas que me ahorré contigo, logré desperdiciarla en otras cosas inútiles, pero otras cosas al fin.
Siempre estarán en mi esos buenos recuerdos que pasamos sin saber...
Sé que si el Señor te ha llamado, es porque en su santa cocina precisa una Jarra Eléctrica eficaz como vos y sé que sabrá usarte y disfrutarte, como lo hice yo en estos 3 años.
Gracias por tanto, jamás volveré a comprar otra jarra eléctrica, conseguiré un zoom en el mercado negro y calentaré agua de manera ilegal con eso, hasta hacer saltar todos los tapones del tablero eléctrico de casa, pero te prometo que nadie ocupará tu lugar en mi corazón con agujeritos.
Nos vemos pronto mi fiel amiga. Te voy a extrañar. Los mates sin ti tendrán otro sabor. Te amo, y como siempre te cantaba... "Eeeeend aaaaaaaiiai uiiil olueeeeiis looov iuuuuuuu uuuuuuuuuu."
PD: Mañana el entierro es a las 10:00 AM vengan todos los que supieron tomar mate gracias a al agua que ella calentaba de manera incondicional.
PD2: Compañeros, si están leyendo esto, por favor avisen en el trabajo que no voy.
Te acordás cuando una vez te confesé que para mi eras el mejor invento eléctrico del hombre después de la picana? No exageraba. Siempre lo sentí así.
Recuerdo el primer día que te vi, roja como la pasión, con un logo negro que decía "Kassel", entre tantas jarras eléctricas carísimas y de marcas chetas, en una góndola del Devoto... 13 dólares me costaste (cuando el dólar ni siquiera estaba tan alto) pero lo que me diste en vida, no se puede medir en dinero...
Recuerdo haberte subestimado en nuestro primer encuentro, te compré pensando "Esta calentadora de agua (porque en ese entonces jamás había tenido una jarra eléctrica y pensaba que se llamaba "calentadora de agua") barata y poronga, que tiene nombre alemán y seguramente es made in China, si me dura 3 meses tiro cuetes". Pero en los hechos, me demostraste que estaba equivocado.
Recuerdo cuando al año y medio se te rompió la llave que cortaba la calentada de agua, sin embargo, seguiste como una campeona, calentando el agua de mis mejores mates.
Incluso cuando me olvidaba de desenchufarte, no cortabas y seguías calentando el agua, convirtiendo la cocina en un sauna, haciendo que mi vieja me cagara a puteadas por pelotudo.
Recuerdo también cuando te dejé toda una noche calentando, me olvidé por enésima vez de desenchufarte y quedaste seca como tanque de moto de uruguayo clase media baja a fin de mes (si estaré emocionado que hasta me salió una hermosa metáfora). En ese momento pensé que habías muerto por mi culpa, mas al colocarte agua nuevamente, resucitaste y volviste a calentarla con más fuerza que nunca.
Los minutos que ahorré gracias a vos, valen oro. La hija de puta e inútil de la caldera que se calienta a gas en la cocina me hacía perder horas de mi vida a lo bobo. Esas horas que me ahorré contigo, logré desperdiciarla en otras cosas inútiles, pero otras cosas al fin.
Siempre estarán en mi esos buenos recuerdos que pasamos sin saber...
Sé que si el Señor te ha llamado, es porque en su santa cocina precisa una Jarra Eléctrica eficaz como vos y sé que sabrá usarte y disfrutarte, como lo hice yo en estos 3 años.
Gracias por tanto, jamás volveré a comprar otra jarra eléctrica, conseguiré un zoom en el mercado negro y calentaré agua de manera ilegal con eso, hasta hacer saltar todos los tapones del tablero eléctrico de casa, pero te prometo que nadie ocupará tu lugar en mi corazón con agujeritos.
Nos vemos pronto mi fiel amiga. Te voy a extrañar. Los mates sin ti tendrán otro sabor. Te amo, y como siempre te cantaba... "Eeeeend aaaaaaaiiai uiiil olueeeeiis looov iuuuuuuu uuuuuuuuuu."
PD: Mañana el entierro es a las 10:00 AM vengan todos los que supieron tomar mate gracias a al agua que ella calentaba de manera incondicional.
PD2: Compañeros, si están leyendo esto, por favor avisen en el trabajo que no voy.